El sueño de cualquier persona apasionada por algo es llegar al suministro total, la fuente definitiva, esa instancia donde "nunca se acaba" lo que nos gusta: el amor de nuestra pareja, esa gaseosa tan rica y fresca, la era dorada de nuestro equipo de fútbol, los discos de Babasónicos, you name it. En este caso vamos a hablar del porro y de la quimera definitiva, que es tener todo el año. Hay muchas formas de lograrlo pero la mayoría implican una suma altísima de dinero. Por eso vamos a intentar asegurarnos un suministro constante de flores frescas con la menor inversión.

El cannabis es una planta estacional, como ya explicó Juan en esta guía de cultivo en exterior a la que podés recurrir si en este texto mío no terminás de entender algo sobre sustratos, preventivos, fertilizantes o fases de la planta. Atajos que pienso tomar para no volver esta guía muy redundante. La diferencia es que en este caso vamos a tener que encarar inevitablemente un cultivo de interior, invernadero o indoor. Una carpa, una lámpara, coolers, paciencia y constancia.

Mucha gente puede combinar y hacer cultivos de exterior en paralelo a varias cosechas indoor en el año. Es la situación ideal, pero quiero plantear el peor escenario posible ahora, que es el de no poder tener plantas fuera. Aunque elder millennials –como nosotros en 421– lo usamos cotidianamente, el faso es más que nada un consumo de adultos en sus veintes, que no siempre cuentan con un espacio a disposición para plantar en tierra (por vivir en monoambientes, por caso) o tal vez sí pero no tienen autoridad para hacerlo (por vivir con sus padres, por ejemplo).

El objetivo

Existen cientos de combinaciones posibles entre carpas, luces, sistemas de ventilación, instrumentales específicos, genéticas, técnicas y suplementos para cultivar marihuana, con resultados variables que pueden ir de un frasco lleno de flores a cosechas de más de medio kilo resueltas en una esquina del living. Acá vamos a mantenerlo barato y real, pero tratando de maximizar la producción al punto de llegar a tener un gramo disponible al día.

Entonces, el objetivo de este proyecto va a ser conseguir 365 gramos en un año, con cinco cosechas consecutivas. Hablamos de un presupuesto no menor a los 2 millones de pesos en el mercado p2p. El desafío es conseguir lo mismo con un 70% de descuento.

Las semillas

Para estos fines, vamos a necesitar plantas de rápido crecimiento y mucha producción, para aprovechar a tope el tiempo y el espacio a disposición. Además, tendremos que asegurarnos de que todas salgan hembras, por lo que conseguir semillas feminizadas será mandatario. Pero evitaremos las autoflorecientes, ya que vamos a tener que manipular –mediante la exposición a la luz y técnicas SCROG– el ritmo de crecimiento y el pase de fase de las plantas.

Diría que una variedad de Critical de tu laboratorio favorito sería buen punto de partida. En general, las Critical suelen ofrecer una cantidad piola de THC, de entre un 17% y un 19% en situación ideal de cultivo, cosecha, secado y curado. En carpa ganan una altura de 1,2 metros, como mucho 1,4. Con fierros y abono acorde, pueden tirar hasta medio kilo seco por metro cuadrado. Y todo eso en un ciclo muy corto, de unos 60/70 días. O sea, cinco en el año.

La Critical Smog auto de Gold Seeds fue una de las mejores plantas que coseché en indoor, por facilidad de cultivo, volumen y resultados, pero no se estarían consiguiendo semillas. Igualmente, todos los bancos tienen una Critical feminizada para ofrecer: BSF tiene su Critical + 2 femi, más potente que lo normal, con un 20% de THC pero una cosecha unos días más larga. El blíster de 12 semillas está menos de $100.000. Algo sensato para arrancar.

El equipamiento

Las Critical no sólo son perfectas para principiantes y descuidados –la resistencia a las plagas y la fuerza intrínseca de casi cualquier semilla de laboratorio las vuelve un poco "a prueba de boludos"–, sino que además son el prototipo de genética que queremos meter en nuestro invernadero. Y para mantener los costos bajos y el espacio al mínimo, nos la vamos a arreglar con la carpa más chica del mercado, que es de 40x40x160. Hoy una de ésas se puede conseguir con envío a domicilio y todo en menos de $160.000.

No hay mucho misterio con las carpas. Armás un paralelepípedo con cañitos para darle forma a la estructura y lo recubrís con la lona, que tiene refractario por dentro, cierre al frente y dos tomas de aire. En esas bocas se ponen dos coolers de 10 centímetros, como los de computadora. Uno ingresando aire fresco a la carpa por el de abajo, que queda a unos 30 centímetros del piso, y el otro extrayendo el aire caliente por arriba. Por unos $30.000 más venden el par armado y cableado, ya con el transformador y todo.

El último elemento, y el más importante, es la lámpara. Una LED de 100w está en el piso de suficiencia para este tamaño de carpa, que recordemos será de 40x40x160, dando algo así como 0,15 metros cuadrados de cultivo. El LED full spectrum de 100w de GrowTech, una marca que probé y nunca me dio problemas, está otros $100.000. Las lámparas CFL son más baratas y generan menos calor que las LED, pero consumen más y se quedan cortas si buscás buen rendimiento en gramos. Por el contrario, las HID dan muchísima cantidad, por su intensidad, pero generan mucho calor, requieren mayor ventilación, tienen menos vida útil y gastan más. No sobreactúes, conseguite una LED full spectrum. 

El presupuesto

Saquemos algunos cálculos. Hastá acá tenemos $100.000 de semillas para todo el año (cosecharemos sólo cinco plantas, pero contamos semillas extra por las dudas). A eso se suman $160.000 de la carpa, $30.000 de los coolers y $100.000 de la lámpara. Se suman $10.000 del timer para la lámpara, otros $10.000 para el termohigrómetro y otros $10.000 más para la redecilla elástica de 40x40 con la que haceremos SCROG, que se consigue más barata en casas de repuestos de motos, donde las llaman "red pulpito".

Los $80.000 que faltan para redondear el medio palo alcanzan para comprar las macetas (varias sopladas de 1 litro y al menos una textil de 10 litros, todo por 10 o 15k), sustrato de indoor (80 litros por 20k), preventivos y fertilizantes básicos para cada fase. 

También hay que sumar el costo energético de la lámpara. De cada ciclo de 10 semanas que vamos a encarar, durante los primeros 20 días la lámpara va a tirar 20 horas de luz, usando 40 kilowatts. Los otros 50 días va a tirar 12 horas de luz al día, sumando otros 60 kilowatts. Al precio actual, son unos $12.000 de gasto de luz extra por cada ciclo, anualizado unos $60.000 más inflación, más el consumo que suman los coolers, que siempre van prendidos.

Y ya está amigo, no necesitás más que una inversión total de $600.000, o unos 500 dólares, para generar un flujo continuo de porro como para tener un gramo por día.

Los procedimientos

Voy a acelerar acá, porque sobre todo esto hay cantidad de data en la nota de Juan y en internet en general.

El primer ciclo arranca unas semanas antes de que armes la carpa, le pongas los coolers, le cuelgues la lámpara y enchufes todo. La plántula que vas a meter debería ser una que ya tengas germinada y crecida durante unos días fuera de la carpa. Yo suelo germinar metiendo la semilla directamente en un vaso de agua y pasándola a macetitas micro al otro día. Las que salen, las trasplanto al toque a macetas mini de 1 litro y cubro el tallo con sustrato, de modo que las primeras hojas serrucho queden casi a la altura de la tierra.

Durante 20 días les vas a dar de comer luz, a razón de 20 horas al día, cuidando la temperatura interna de la carpa –que idealmente tiene que estar siempre entre los 20 y los 25 grados– y el nivel de humedad. Los primeros cuatro o cinco días necesitás la humedad máxima. Además de regar muy muy poquito durante el día, en el tiempo que la lámpara esté apagada vas a tener que aprovechar para rociar la plántula, así que calculá a qué hora se apaga la luz.

En las semanas dos y tres necesitás una humedad del 65%. Y en esa tercera podés sumar algún suplemento nutricional al sustrato o algún tipo de abono. En cuanto la planta empiece a mostrar señales de haberse asentado y estar dando buen crecimiento de ramas y hojas, le metés un corte apical y colocás la red de SCROG.

Este ciclo vegetativo va a durar tres semanas en indoor –más esa otra semana previa de germinación y plántula fuera de la carpa–, y en sus últimos días te tenés que dedicar a ir acomodando los brotes en la red SCROG, maximizando la superficie cubierta.

Al completar la tercera semana, esté como esté, vamos a forzar a la planta a pasar a floración. Para esto vamos a pasar el timer de la LED a sólo 12 horas de luz. En los primeros diez días, la planta va a pegar un crecimiento importante, que vamos a ir acompañando con abono, subiendo de a poco la lámpara y la red, y acomodando los brotes nuevos. Idealmente, para la mitad del ciclo, al final de la segunda semana de floración o quinta de ingresada al indoor, ya deberíamos tener gran parte de la superficie de cultivo cubierta.

De ahí en más, es seguir cuidando la planta con preventivos y fertilizantes durante otras tres semanas (la 6, la 7 y la 8 del ciclo) para llegar a maximizar la potencia de la cosecha. En las últiamas dos semanas retiramos todo tratamiento, empezamos el lavado de raíces y vamos alargando de a poco las horas de oscuridad de la carpa. En paralelo, fuera de la carpa ya vamos a tener que estar germinando la nueva tanda de semillas y creciendo las plántulas.

Los resultados

Si todo sale bien, al cabo de 10 semanas vas a estar cortando un promedio de 70 gramos de Critical, precisamente 1g por día. Una Critical da tranquilamente 500 gramos por metro cuadrado, y en una carpa de 40x40 podés tener hasta 0,15 metros cuadrados cubiertos de flores, lo que de hecho da 75. Otras genéticas pueden incluso llegar a los 600 o 650g por metro cuadrado en indoor, lo que llevaría el rendimiento ya muy cerca de los 100g por ciclo.

Es verdad que, para la primera tanda, no vas a tener porro hasta que esperes al secado y curado de la primera cosecha, pero una vez que estés con la rueda funcionando, te olvidás. En todo caso, todavía te van a estar sobrando más de un palo y medio de pesos.